Todos en nuestras vidas en un momento determinado hemos concebido algún plan o Proyecto, sea de manera consciente o inconsciente, bien estructurado o mal estructurado. El hecho es que de alguna manera hemos vivido esta experiencia.
Los Planes son una excelente herramienta si queremos ver resultados tangibles en nuestro vivir, pues nos ayudan a considerar todo los por menores y detalles que debes tener presente un accionar determinado. Nos ayudan a improvisar menos y hacer más efectivos y eficientes.
Sin embargo existe un mito o tabú con relación a los Planes y/o Proyectos, se dice en el ambiente popular que si uno comenta con alguien los detalles del Plan, no se da, es decir el mismo comienza a cambiar y no llega a ejecutarse y no vemos los resultados que estábamos esperando.
Yo no quería creer esto, por lo cual sometí a prueba esta creencia popular, el precio que tuve que pagar para aceptar esta triste realidad fue muy alto, pues en el 1999 tenía planes concretos de irme a trabajar con una visa de trabajo a Estados Unidos, informe a varias personas de tan maravillosa oportunidad de vida, la información se rego como pólvora y cuando solo me faltaba una llamada para que me avisaran la fecha cuando iniciaría el trabajo, todo se derrumbo, me quede como dicen, con el moño hecho.
En otra ocasión, no hace mucho de esto, se me presento otra oportunidad muy interesante y fue tanto lo que hable de ella que todavía no creo que se fue de mis manos.
Esto no solo aplica para proyectos o planes de negocios y trabajo, también para asuntos emocionales como son el llegar a iniciar una relación amorosa con un sexo opuesto, pues si también lo sazona mucho con tus conocidos, no veras ni una mirada de esa persona, se te ira de las manos.
Algunos filósofos, atribuyen estas fracasos a que no todo el mundo se alegra de tus triunfos y logros, tienen a generar energía negativa y esto hace que lo que tenias en las manos se te vaya, estas personas por lo general no tienen conciencia de esto, lo hacen sin darse cuenta, pues no sé si a usted la ha sucedido, cuando algún amigo le confiesa algo que le va a pasar, uno a veces exclama “ Diablo que suerte tienes y yo que toda la vida he deseado eso, no he podido alcanzarlo, felicidades..” o inocentemente hemos dicho “… Qué envidia te tengo, caramba que afortunado eres, disfrútalo.”
En un artículo de los primeros que inicie en esta página, le mencione algo del Inconsciente, y le prometí hablar de él con más detalle, pues esta parte de nuestro ser muy poco o casi nada la conocemos, tiene mucho más poder sobre nosotros que nuestro consiente, pues trabaja de manera clandestina en nuestras decisiones y por eso muchas veces no entendemos porque hicimos tal o cual cosa. Le prometo pronto hablar del Inconsciente.
Aunque este no lo crea esto sucede, si desea póngalo en prueba, pero este consiente del precio que tendrá que pagar.
Recomendaciones: Si eres de las personas que siente una doble emoción cuando alguien sabe de tus logros y triunfos, espera que se materialicen y luego coméntalos, no hables de ellos antes de que se den, pueden que no se den.
Los Planes son una excelente herramienta si queremos ver resultados tangibles en nuestro vivir, pues nos ayudan a considerar todo los por menores y detalles que debes tener presente un accionar determinado. Nos ayudan a improvisar menos y hacer más efectivos y eficientes.
Sin embargo existe un mito o tabú con relación a los Planes y/o Proyectos, se dice en el ambiente popular que si uno comenta con alguien los detalles del Plan, no se da, es decir el mismo comienza a cambiar y no llega a ejecutarse y no vemos los resultados que estábamos esperando.
Yo no quería creer esto, por lo cual sometí a prueba esta creencia popular, el precio que tuve que pagar para aceptar esta triste realidad fue muy alto, pues en el 1999 tenía planes concretos de irme a trabajar con una visa de trabajo a Estados Unidos, informe a varias personas de tan maravillosa oportunidad de vida, la información se rego como pólvora y cuando solo me faltaba una llamada para que me avisaran la fecha cuando iniciaría el trabajo, todo se derrumbo, me quede como dicen, con el moño hecho.
En otra ocasión, no hace mucho de esto, se me presento otra oportunidad muy interesante y fue tanto lo que hable de ella que todavía no creo que se fue de mis manos.
Esto no solo aplica para proyectos o planes de negocios y trabajo, también para asuntos emocionales como son el llegar a iniciar una relación amorosa con un sexo opuesto, pues si también lo sazona mucho con tus conocidos, no veras ni una mirada de esa persona, se te ira de las manos.
Algunos filósofos, atribuyen estas fracasos a que no todo el mundo se alegra de tus triunfos y logros, tienen a generar energía negativa y esto hace que lo que tenias en las manos se te vaya, estas personas por lo general no tienen conciencia de esto, lo hacen sin darse cuenta, pues no sé si a usted la ha sucedido, cuando algún amigo le confiesa algo que le va a pasar, uno a veces exclama “ Diablo que suerte tienes y yo que toda la vida he deseado eso, no he podido alcanzarlo, felicidades..” o inocentemente hemos dicho “… Qué envidia te tengo, caramba que afortunado eres, disfrútalo.”
En un artículo de los primeros que inicie en esta página, le mencione algo del Inconsciente, y le prometí hablar de él con más detalle, pues esta parte de nuestro ser muy poco o casi nada la conocemos, tiene mucho más poder sobre nosotros que nuestro consiente, pues trabaja de manera clandestina en nuestras decisiones y por eso muchas veces no entendemos porque hicimos tal o cual cosa. Le prometo pronto hablar del Inconsciente.
Aunque este no lo crea esto sucede, si desea póngalo en prueba, pero este consiente del precio que tendrá que pagar.
Recomendaciones: Si eres de las personas que siente una doble emoción cuando alguien sabe de tus logros y triunfos, espera que se materialicen y luego coméntalos, no hables de ellos antes de que se den, pueden que no se den.
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