Algo que siempre le he dicho a mis conocidos y amigos, es el hecho que la persona que nació con carencia económica solo viene a la Tierra a pasar vergüenza, trabajo y necesidad, y si no esta de acuerdo con esto mejor que no hubiese nacido, pues esto lo puede vivir en cualquier momento.
Sin embargo de acuerdo a la actitud que postremos ante esta triste y amarga realidad, la misma puede tornarse agradable y hasta placentera, pues nos dejara frutos de mucho valor con relacion a las relaciones personales que desarrollemos, ayudando a que se nos abran muchas puertas; pues con una pizca de humildad podemos abrir el corazón mas encontremos; todo en la vida lo determina la manera como aceptemos o veamos la cosas.
Recuerdo un suceso en el trabajo donde mas tiempo labore de manera continua, que en fecha de otoño un amigo de infancia nos invito a mi y a dos amigos a una Boda donde el seria jefe de camareros y nosotros puros paracaidistas (personas no invitadas por los dueños de la fiesta); teníamos garantizadas todas las bebidas y los brindis; nos fotografiamos con los novios y bailamos a todas las damas de la fiesta no importando su edad; el hecho es que finalizada la boda a media noche, solo recuerdo que le dije a mis dos amigos móntense en la Moto y de ahí en adelante solo se lo que ellos me contaron; según ellos tuvimos un accidente, en el cual cuando caí en la calle me dormí y desperté en un hospital donde me estaban curando un tobillo; en el accidente se me perdieron los zapatos que traía puestos; me dieron licencia medica en el trabajo y cuando retorne a trabajar tuve que utilizar unos zapatos con un hoyo en la suela, lo que causaba que mis pies se mojaran, pues en esos días de otoño estaba lloviendo mucho; decidí colocarme una bolsa plástica en los pies luego que me ponía las medias; un día cuando caminaba en el área de la oficina alguien noto la bolsa plástica, pues las medias eran rojas y la bolsa era azul, me la halo, diciendo ¡miren ese Moreno con una lona dentro de los zapatos! Esto provocó una tormenta de risas en el departamento, la cual tomo más fuerza cuando levante el pie y expuse la razón por la cual usaba dicho protector (el hoyo que tenia en la suela del zapato); alguien del grupo me ofreció un par de tenis que tenia en su casa sin usar, por que no le gustaban, le puso el precio de 400 pesos, a lo cual acepte, pues el método de pago era a crédito; al día siguiente lleve conmigo al trabajo un par de medias deportivas que tenia guardadas desde hace mas de tres meses, para poder lucir bien los nuevos calzados que tendría; el compañero antes de hacerme entrega de los tenis, me dice que ya no son 400 pesos, si no que el precio nuevo es de 450 pesos, no tuve mas remedio que aceptar, pues no tenia mas alternativas; bueno voy a un lugar apartado, me pongo los tenis, tiro los zapatos viejos a un zafacón y salgo al área de trabajo a exhibir mis nuevos atuendos, todo fue una algarabía y el personaje que me cedió los tenis me mira desde lejos como asombrado, yo creo que es por la obra que hizo, sin embargo a los cinco minutos descubro la verdadera razón de su mirada; me dice que me quite los tenis que ya no lo vendería, continuo en mi ingenuidad y le respondo que para devolverlos debe pagarme, esto lo hace enojarse y me replica con voz de furia que le devuelva sus tenis… Me lleno de asombro, pero mucho mas los presente y decido luego de analizar un poco su actitud, devolverles sus tenis, no sin antes decir delante de los presentes, que el es una persona sin palabras e inmadura, que realmente quien pasa la vergüenza delante de todos es el y no yo.
Me voy descalzo al lugar apartado, saco del zafacón los zapatos viejos, me lo pongo de nuevo, voy al área de la oficina y alguien del grupo me habla aparte y me dice que me ayudara a calzarme con nuevos zapatos.
No importa que tan grande sea tu vergüenza, recíbela con la frente en alto y nunca pague al otro con la misma moneda de ignorancia y maldad que te han pagado; para que con tu actitud y ejemplo lo enseñe a Vivir y a Convivir con los demás.
Sin embargo de acuerdo a la actitud que postremos ante esta triste y amarga realidad, la misma puede tornarse agradable y hasta placentera, pues nos dejara frutos de mucho valor con relacion a las relaciones personales que desarrollemos, ayudando a que se nos abran muchas puertas; pues con una pizca de humildad podemos abrir el corazón mas encontremos; todo en la vida lo determina la manera como aceptemos o veamos la cosas.
Recuerdo un suceso en el trabajo donde mas tiempo labore de manera continua, que en fecha de otoño un amigo de infancia nos invito a mi y a dos amigos a una Boda donde el seria jefe de camareros y nosotros puros paracaidistas (personas no invitadas por los dueños de la fiesta); teníamos garantizadas todas las bebidas y los brindis; nos fotografiamos con los novios y bailamos a todas las damas de la fiesta no importando su edad; el hecho es que finalizada la boda a media noche, solo recuerdo que le dije a mis dos amigos móntense en la Moto y de ahí en adelante solo se lo que ellos me contaron; según ellos tuvimos un accidente, en el cual cuando caí en la calle me dormí y desperté en un hospital donde me estaban curando un tobillo; en el accidente se me perdieron los zapatos que traía puestos; me dieron licencia medica en el trabajo y cuando retorne a trabajar tuve que utilizar unos zapatos con un hoyo en la suela, lo que causaba que mis pies se mojaran, pues en esos días de otoño estaba lloviendo mucho; decidí colocarme una bolsa plástica en los pies luego que me ponía las medias; un día cuando caminaba en el área de la oficina alguien noto la bolsa plástica, pues las medias eran rojas y la bolsa era azul, me la halo, diciendo ¡miren ese Moreno con una lona dentro de los zapatos! Esto provocó una tormenta de risas en el departamento, la cual tomo más fuerza cuando levante el pie y expuse la razón por la cual usaba dicho protector (el hoyo que tenia en la suela del zapato); alguien del grupo me ofreció un par de tenis que tenia en su casa sin usar, por que no le gustaban, le puso el precio de 400 pesos, a lo cual acepte, pues el método de pago era a crédito; al día siguiente lleve conmigo al trabajo un par de medias deportivas que tenia guardadas desde hace mas de tres meses, para poder lucir bien los nuevos calzados que tendría; el compañero antes de hacerme entrega de los tenis, me dice que ya no son 400 pesos, si no que el precio nuevo es de 450 pesos, no tuve mas remedio que aceptar, pues no tenia mas alternativas; bueno voy a un lugar apartado, me pongo los tenis, tiro los zapatos viejos a un zafacón y salgo al área de trabajo a exhibir mis nuevos atuendos, todo fue una algarabía y el personaje que me cedió los tenis me mira desde lejos como asombrado, yo creo que es por la obra que hizo, sin embargo a los cinco minutos descubro la verdadera razón de su mirada; me dice que me quite los tenis que ya no lo vendería, continuo en mi ingenuidad y le respondo que para devolverlos debe pagarme, esto lo hace enojarse y me replica con voz de furia que le devuelva sus tenis… Me lleno de asombro, pero mucho mas los presente y decido luego de analizar un poco su actitud, devolverles sus tenis, no sin antes decir delante de los presentes, que el es una persona sin palabras e inmadura, que realmente quien pasa la vergüenza delante de todos es el y no yo.
Me voy descalzo al lugar apartado, saco del zafacón los zapatos viejos, me lo pongo de nuevo, voy al área de la oficina y alguien del grupo me habla aparte y me dice que me ayudara a calzarme con nuevos zapatos.
No importa que tan grande sea tu vergüenza, recíbela con la frente en alto y nunca pague al otro con la misma moneda de ignorancia y maldad que te han pagado; para que con tu actitud y ejemplo lo enseñe a Vivir y a Convivir con los demás.
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