
martes, 30 de noviembre de 2010
El Tiempo mata

lunes, 29 de noviembre de 2010
La Clemencia o Misericordia

miércoles, 24 de noviembre de 2010
La Esperanza del Mañana
Muchos pensaran que estoy siendo paranoico con el tema de los Hijos, sin embargo insisto en el tema, pues de acuerdo a como se desarrollen nuestros hijos y el camino que tomen, de esa misma manera será el nivel de tranquilidad y paz que tendremos nosotros en nuestra vejez; ya que no es lo mismo un hijo que se haga profesional, se inserte en la sociedad productiva, forme una familia, a un hijo que renuncie a estudiar, se deje llevar de una mala compañía y haga de su vida una tragedia, arrastrando con ella la vida de todo el que lo ama.
Entonces vuelvo y toco el tema de la sobre protección que algunos les damos a los hijos, haciéndolos cada vez más dependientes, en vez de ayudarlos hacer independientes; digo esto porque me quede observando a una madre ayudando a su hijo con las tareas del colegio, ella se afanaba en la elaboración de un resumen que su hijo debía entregar; le dije a esa madre que su rol debía ser de orientadora y no de hacedora de la tarea; debido a que su hijo está en un grado donde debe comenzar a valerse por sí mismo en sus quehaceres educativos, ya no está en Maternal o Kínder, para que ella le ayude tanto en hacer las tareas.
Cuando yo estaba en el mismo grado que ese joven, yo no tenía los recursos para hacer las tareas como lo tiene el; solo contaba con dos libros de texto (los mas importante) y las tareas de las demás asignaturas debía de hacerlas en una Biblioteca; los trabajos lo hacía yo, presentándolo tal y como me quedaban, sin que mis padres le hicieran ningún tipo de retoque. No haga lo que tu hijo debe de hacer, déjalo crecer, que se desarrolle; que experimente por si solo el sabor del éxito y el de la derrota, que sepa que en la vida se gana y se pierde (aunque sostengo la teoría que el perder esta en la mente).
A veces la búsqueda de la perfección en lo que hacen los hijos, nos puede llevar a un lugar no deseado, pues podemos hacer que nuestros hijos no se desarrollen de forma natural y crear en ellos traumas en su desarrollo como individuos. El errar no del todo es malo, pues cuando nos equivocamos o cometemos algún error, esto nos ayuda a crecer, analizar los hechos, a ser mejor; también nos ayuda a determinar cuando algo está bien y cuando está mal; por lo contrario si otro hace lo que debemos hacer, como sabremos en qué punto del proceso estuvo el error o la falla, ya que no fuimos parte del proceso. Dejemos los hijos Vivir y Convivir, para que desarrollen su propia personalidad y no hagamos de ellos personas vacías, sin propósitos y sin utilidad.
lunes, 22 de noviembre de 2010
Cada cual tiene su Cruz..

Cuando las personas pasan por situaciones difíciles, creen en sus mentes que son las únicas en el mundo que están siendo sometida a tal tragedia; uno creo que su caso es el mas difícil y el mas traumático. Sin embargo al entrar en contacto con otros, uno se da cuenta que su realidad o su Cruz, es mas ligera y fácil de llevar que la del otro; esto hace que uno se llene de esperanza y de alivio, pues como cuando uno sabe que otros están pasando por lo mismo o por algo mucho mas peor, esto lo llena de conformidad.
miércoles, 17 de noviembre de 2010
Películas Interesantes

Las películas que ve y me gustaría recomendarles están:
El Secreto de sus ojos (ganadora del oscar, película extranjera)
KenPark (excelente para adolescentes)
Kids (excelente para adolescentes)
Amores locos
Antichrist
Inception
Malena (es vieja, pero muy buena)
Malizia (vieja pero muy interesante)
Afew good man (la volvi a ver, es como la 5ta vez que la veo)
Dejame entrar (Let the right One in)
Cadena de favores
El novio de mi novia (cuidado con bajar la que no es, hay una que es pornográfica)
domingo, 14 de noviembre de 2010
Enganchado de Loco.

Muchas personas cuando se hacen adultos y ven lo difícil que puede ser la vida, se llenan de miedo y negación, entonces la única vía que le queda es hacerse el Loco o el sin vergüenza; De esa manera estarán traspasando sus responsabilidades a los demás.
martes, 9 de noviembre de 2010
Porque los hijos no quieren marcharse luego que son Adultos
Recientemente estaba conversando con varios amigos y familiares que tienen hijos adolescentes y mayores de edad, de que hoy en día luego que los hijos se hacen adultos, se quedan viviendo con sus padres y no se ve en ellos las intenciones de hacer su propia familia; le decía que esto se debe a que ellos están bastantes cómodos, viviendo con todas las facilidades y servicios, por lo tanto, no van a dejar ese estado de bienestar tan fácil; mientras que nosotros, cada día se fortalecía la necesidad imperativa de hacernos adultos e independizarnos, para poder tener las cosas que nuestros padres nos negaban o simplemente no podían darnos.
Por estas razones tenemos adolescentes que no quieren estudiar, no quieren tomar responsabilidades en sus vidas, pues ellos entienden que la vida de comodidades que poseen nunca se acabara y por ende no tienen necesidad de sacrificar sus vidas y su tiempo. Mientras nosotros decidimos prepararnos, trabajar para conseguir una mejor vida e incluso brindarles a nuestros una mejor vida también.
Le decía, que yo en cierta forma los comprendo y que cualquiera que tenga su pensar, también haría lo mismo, pues ¿Quien no quisiera vivir con todas las comodidades sin tener que hacer un minímo esfuerzo? ¿Quién no le gustaría tener una casa con cama, comida abajo o quizás a ningún precio, vehículo, agua y energía eléctrica permanente? Pues queremos que ellos tengan, lo que nosotros no tuvimos; llenar nuestro ego, dando a nuestros hijos lo que nuestros padres no nos dieron.
Entonces ¿De quien es la culpa o la responsabilidad de la decisión que hoy nuestros hijos toman?, bueno, de nosotros mismos; ya que somos nosotros los que los aprovisionamos de todo lo que tienen y quizás no hemos sido fuertes en hacerles entender que esas comodidades tienen un precio a pagar, que no vienen desde el cielo, sino que son fruto de sudor y lagrimas; talves ellos pudieran apreciarla un su justo valor y dedicarse a mantenerla por toda la vida, para que sus hijos también puedan disfrutar de lo que ellos también están disfrutando.
Los vagos de hoy son frutos del consentimiento y la falta de responsabilidad de los padres del ayer. El amor hacia un hijo, no solo se demuestra con darle todo lo que pide y exige, sino también con hacerle saber que el mundo es mucho más de lo que él puede ver.
Por todo lo demás, es nuestra responsabilidad brindarles amor, ternura, comprensión, alimentación, educación, salud y diversión, pero también enseñarlos a Vivir y Convivir.